El modelo del vehículo Skoda 130 fue un pequeño coche confortable del tipo familiar, cuyo nombre interno de fabricación era 742. Este modelo de coche disponía de una carrocería tipo berlina de 4 puertas y una versión coupe de 2 puertas.
El Skoda 130 abarcaba 4,2 metros de longitud, 1,6 metros de ancho y 1,4 metros de alto, con un peso aproximado de 928 Kg. Su ligereza se debía a que los paneles de la carrocería estaban hechos de aluminio incluyendo el techo y la capa exterior de las puertas.
El Skoda 130 montaba bajo el capó un potente motor tetracilíndrico de gasolina de 1.3 litros con control de válvulas OHV y doble carburación Weber. La mecánica también contaba con una culata de ocho canales y lubricación por cárter seco para garantizar el flujo de lubricante ante cualquier situación o fuerza.
Asimismo, los cilindros y el cárter estaban hechos de aluminio, mientras que la culata era de fundición, permitiendo un mejor desempeño del vehículo. Con esta configuración este motor permitía desarrollar unos generosos 140 CV de potencia máxima a velocidades de hasta 220 km/h en pocos segundos.
Los primeros modelos del modelo compacto Skoda 130 se introdujeron al mercado automotriz en agosto de 1984, poco tiempo después que se presentara la actualización del Skoda 105. Cabe destacar que su versión sport el Skoda 130 RS fue conocido como el Porsche del Este por su ligereza, su rapidez y su increíble manejo.
La introducción de la serie Skoda 130 podría haber sido un éxito razonablemente grande para Skoda, pero el diseño de ingeniería básica se remonta a la década de 1960. Por lo tanto, la marca concientizó que su modelo estaba extremadamente desactualizado en la década final de 1980, cesando su producción en el año 1991.